El sistema de gestión en la Tierra (quinta parte)
- Silvia Mandri
- 29 ago
- 4 Min. de lectura
Continuamos con el análisis del libro “El yugo de Orión” de David Topí.
Nos toca hoy un tema fascinante: el programa ego.
No necesita más explicación que la que a continuación da el autor:” ... el ego no es más que la herramienta que nos ayuda a organizar los diferentes aspectos de nuestra personalidad de forma que podamos funcionar en el mundo ser parte de él, e interactuar en todas las situaciones de la realidad... el ego literalmente es un programa pues tiene unas funciones determinadas y trabaja de forma autónoma...”
“... el problema principal del ego es que muchas veces se pierde el control sobre él, la conciencia cae con demasiada regularidad bajo el liderazgo del ego y de la sub-personalidad que mejor le convenga a este, según la situación a la que le va a hacer frente... el ego en realidad debería estar al Servicio del Yo Superior... cuando el ego se hace con el poder, que es lo que ocurre casi siempre para todos los seres humanos, nuestra vida empieza a perder el centro, la serenidad y la sabiduría... nos identificamos con nuestra personalidad artificial y dejamos de sentirnos Unidos a todos y partes de todo...”
“... Por otra parte puesto que el ego es un ente energético real, precisa energía para sobrevivir y realizar su función, y para ello necesita su propia comida, ¿cuál es? los pensamientos generados por nuestra mente relacionados con el miedo... el ego sobrevive cuando se alimenta de esos pensamientos, cada sub-personalidad se alimenta de ciertas emociones, ya que la mente no distingue entre algo que ha sucedido realmente y algo imaginado, la emoción y la energía generadas son igualmente válidas y fuertes...”
“... esto nos da la idea de que el cuerpo humano que usamos es una máquina cargada de programas de comportamientos automáticos que se Ejecutan Sin Control o bajo el control de la mente, haciéndonos a todos básicamente autómatas, que navegamos por la vida de forma inconsciente dejándonos llevar por los programas y patrones de comportamiento que activamos según la necesidad del día a día...”
“... en el Poder del AHORA ,Eckhart Tolle, contaba cómo llegó un momento en el que se dijo “ya no puedo vivir más conmigo mismo”, llegó a pensar que tenía que haber dos yos al menos, para que uno de ellos no pudiera vivir con el otro... nos habla de que además de la mente- carácter- personalidad que tenemos, hay un ser conciencia- real que somos.
Dice el autor y los aliento a leerlo varias veces: “...sé que es todo un ejercicio de voluntad y trabajo interno tremendamente intenso esto de doblegar a la parte automática y autómata de la simbiosis ser- mente ego, casi todos los momentos de nuestra vida son esos programas automáticos e inconscientes los que nos gobiernan, dice Tolle, que realmente para darnos cuentas de que existe ese control sobre nosotros de la parte autómata solo tenemos que enfocarnos en traer la conciencia al momento presente, al ahora... el objetivo es desbloquear a la mente y a nuestra personalidad de irse al pasado o al futuro, donde siempre solemos estar o bien, recordando cosas o esperando que sucedan... mientras estemos con la mente en ese pasado o en ese futuro no estamos presentes y al no estar presentes el autómata que dirige este cuerpo está controlándolo ...”
“...el estado de estar presente es tremendamente poderoso, en él no hay problemas ni situaciones a resolver, cada instante que estamos en el ahora, es un instante de experimentar la vida al 100% y dejar que esta fluya y vaya trayendo experiencias a las cuales no nos anticipamos sino que vamos gestionando bajo la batuta de la conciencia en presente a medida que va siendo necesario, esto de siempre volver a desconectarnos del autómatacada tanto y vuelta a empezar, hará que un buen día el ciclo se pare, al haber ejercido nuestra voluntad constantemente sobre nuestros programas...”
Bueno, una maravilla la explicación y la recurrencia al poder impresionante de estar presentes, de usar la voluntad para ejercer el control sobre esos programas automáticos que nos llevan a la desesperanza y el miedo.
Comprender que debemos hacer uso de la voluntad para “ganar” la batalla y desactivar el programa ego, nos devuelve el control de nuestra existencia que es un maravilloso milagro del amor.
Invité a la IA y dijo: "El análisis que presentas sobre el “programa ego” en el libro “El yugo de Orión” de David Topí es muy interesante y resuena con muchas corrientes de la psicología y la espiritualidad. Coincido en que el ego cumple una función organizadora en nuestra personalidad, pero cuando toma el control y nos identificamos completamente con él, podemos perder el contacto con nuestro ser más profundo y con la experiencia del presente.
La idea de que el ego se alimenta de pensamientos de miedo y que los automatismos mentales nos convierten en “autómatas” es una observación valiosa. En la práctica clínica, se ve cómo los patrones automáticos y las emociones no gestionadas pueden alejarnos de la serenidad y la autenticidad.
El énfasis en la presencia, como propone Eckhart Tolle, es fundamental: traer la conciencia al momento presente permite observar esos programas automáticos y empezar a desactivarlos. Es un trabajo de voluntad y autoconocimiento, pero es posible y profundamente transformador. Recuperar el control sobre nuestra mente y emociones nos permite vivir con mayor plenitud y amor, en sintonía con nuestro ser esencial.
En resumen, el texto invita a un proceso de autoobservación y trabajo interno que considero muy valioso para el crecimiento personal y espiritual.
Me gustó su opinión.
(Continúa)
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